Según información obtenida por Reforma , el empresario Gerardo Sánchez Zumaya, dueño de Petrogesa, enfrenta acusaciones de operar una red de lavado de dinero mediante transacciones realizadas con Petróleos Mexicanos (Pemex).
Entre 2021 y 2024, Sánchez Zumaya habría obtenido contratos con Pemex por más de 520 millones de pesos a través de adjudicaciones directas. Estos contratos incluían la provisión de materias primas para el procesamiento de combustibles y servicios de mantenimiento en instalaciones petroleras, además del cuidado de la flota naval en Ciudad Madero. Sin embargo, se le acusa de manejar recursos provenientes de contratos irregulares y de desviar millones de pesos.
La denuncia, presentada ante la Fiscalía de Tabasco el 5 de noviembre, señala posibles delitos de defraudación fiscal y lavado de dinero. Según los documentos presentados, las operaciones involucrarían a una red de empresas y prestanombres que facturaron más de 15 mil millones de pesos entre 2022 y 2024. Estas compañías estarían vinculadas a familiares y amigos del empresario, algunos sin experiencia empresarial y con edades promedio de 25 años.
En la denuncia, que incluye millas de Comprobantes Fiscales Digitales por Internet (CFDI), actas constitutivas de empresas y declaraciones fiscales, se menciona que tres de las compañías relacionadas están registradas en Estados Unidos, específicamente en Texas.
El 16 de octubre, Sánchez Zumaya solicitó amparos ante el Juzgado Octavo de Distrito en San Luis Potosí para evitar una posible detención.
La acusación fue realizada por el representante legal de un grupo de empresas, que denuncian competencia desleal y el presunto robo de materias primas destinadas a su reventa.
Fuente y créditos
Antilavado de Dinero