Con esta decisión, José Dirceu recupera sus derechos políticos y deja de ser considerado como alguien con «antecedentes penales». La medida responde a una solicitud de su defensa, que pedía extenderle el fallo de la Sala 2 del STF, el cual había declarado la sospecha del ex juez Sergio Moro en los procesos contra el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
En su fallo, Gilmar Mendes criticó la estrecha relación entre el ex juez Sergio Moro y los fiscales de Curitiba, quienes trabajaron en la operación Lava Jato. El ministro señaló que el principal objetivo de la condena de José Dirceu era proporcionar un sustento para las acusaciones que más tarde se presentarían contra Lula.
Según Gilmar, las acciones de Lava Jato contra Dirceu fueron usadas como una base para formular las denuncias contra Lula. Ante estos hechos, el ministro decidió extender a Dirceu el mismo criterio que anuló las condenas contra el expresidente. Explicó que esta decisión no es una medida general para todos los investigados en Lava Jato, sino que se basa en la existencia de indicios de coordinación entre el juez y los fiscales para utilizar la condena de un acusado como respaldo en las denuncias presentadas contra otro.
Por su parte, José Dirceu recibió la noticia con calma y afirmó confiar en la Justicia. La decisión del STF no solo anula las condenas en su contra, sino que también reconoce que el verdadero objetivo del proceso era perjudicar a Lula, evidenciando la falta de imparcialidad en las acciones de Lava Jato.
Fuente y créditos
Noticias UOL
