Alejandro Márquez, un destacado empresario de San Felipe, Yaracuy, ha tomado medidas drásticas para desvincularse de cualquier asociación con el general Vladimir Padrino López. En un intento por limpiar su reputación en las redes sociales, Márquez ha invertido en un gabinete de peritaje judicial en España y ha contratado a un abogado en Estados Unidos. Según Márquez, la relación entre sus empresas y el sector militar no está relacionada con Padrino López, sino que es el resultado de una campaña de desprestigio impulsada por su expareja.
Alejandro Márquez, cuya fortuna creció durante la era chavista a través de negocios con entidades oficiales en la construcción y comercialización de acero, posee varias compañías importantes: Inversora Parque Central, Metroconcreto y Metroacero. Estas empresas han estado involucradas en numerosos proyectos públicos y privados, incluyendo la construcción de viviendas y la rehabilitación de infraestructuras. A pesar de la aparente conexión entre Metroacero y la Compañía Anónima Venezolana de Industrias Militares (Cavim), Márquez sostiene que no tiene ningún vínculo especial con el ministro de Defensa.
En una entrevista con El Pitazo, Márquez explicó que el crecimiento de sus empresas y los contratos con el sector militar se deben a su capacidad empresarial y no a ninguna relación personal con Padrino López. Afirmó que los rumores sobre su conexión con el ministro son parte de una campaña malintencionada llevada a cabo por su expareja durante una disputa legal por la custodia de su hija. También ha tomado acciones legales en Estados Unidos para abordar la difamación en línea, contratando a Adam Kaufmann, un abogado conocido por su trabajo con clientes controversiales.
Márquez ha negado las especulaciones sobre su supuesta visa de inversionista en España, aclarando que sus visitas a ese país son por motivos personales y no relacionados con inversiones. Además, ha defendido su trayectoria profesional, destacando que comenzó en el sector en 1994 con Materiales Marfil, y ha continuado con diversas empresas que han obtenido contratos significativos con el Instituto de Previsión Social de la Fuerza Armada (Ipsfa).
Inversora Parque Central, la empresa matriz de Márquez, ha estado activa desde 2003 y ha participado en proyectos importantes como la construcción del Estadio Metropolitano de Cabudare y la ampliación del centro comercial Los Próceres. Metroacero, otra de sus compañías destacadas, ha sido descrita como una “empresa revelación del sector metalmecánico” y ha formado parte de alianzas con Cavim para la producción de equipos y materiales de construcción. Sin embargo, Márquez asegura que la disolución de su alianza con Cavim en 2017 se debió a problemas de suministro y no a ninguna influencia indebida.
Fuente y créditos
El Pitazo